Un proyecto de ley propone prohibir el uso de sal en los restaurantes de la ciudad de Nueva York.
La administración de Michael Bloomberg, alcalde de Nueva York, pretende que la sal se ofrezca a los comensales y que sean ellos bajo su responsabilidad quienes condimenten los platos.La decisión está relacionada con la alta tasa de neoyorquinos que sufren una elevada presión arterial y desde el ayuntamiento se anima a los consumidores a tomar menos sal.
Ademas proponen multas de hasta u$d1000 para los cocineros que no respetasen la ley.
18/3/10
COCINAR SIN SAL EN NEW YORK
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