En apenas cuatro días, bailó tango, cenó en Recoleta, pasó por las pistas de dos discos de moda y recaló en una parrilla de San Telmo. Bono, el líder de la banda irlandesa U2, que comenzó su serie de recitales en el Estadio Unico de La Plata, no pierde su tiempo en la Argentina.
Terminado su show en Santiago de Chile, el viernes pasado, la banda se subió al avión para partir rumbo a Buenos Aires. Y el sábado comenzó el raíd, cono Bono a la cabeza. Según publicó el diario La Nación, tras descansar hasta bastante entrada la tarde, pasearon por la ciudad y pararon en el restaurante Fervor, de Posadas y Callao. Allí comieron los cuatro músicos más el manager de la banda, Paul McGuiness. A Bono le quedaron baterías para seguir y se fue a Isabel, en Palermo, y de ahí a Tequila.
El domingo, Bono y The Edge, con sus esposas, asistieron al show Rojo Tango, en el Faena. El lunes al mediodía volvieron al restaurante y bar Isabel para almorzar con un reducido grupo de periodistas locales. Y al día siguiente, después de visitar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la Casa Rosada, Bono enfiló para San Telmo, hasta La Brigada.
Allí cenó - junto a su esposa y otras cuatro personas más-, buñuelos de verdura y empanadas de entrada; un jugoso ojo de bife y asado especial de principal, todo regado con Malbec argentino. De postre, panqueque de dulce de leche.
Después de una ronda de café, y en agradecimiento a la buena comilona y la atención, tocó el piano para los comensales presentes en la parrilla, según consignó el diario La Nación.
Para este fin de semana planea una visita a El Obrero, el bodegón ubicado en La Boca, que ya visitó en su paso anterior por la Argentina. <---Segunda parte del texto ---> Tweet
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