IMPORTANTE CHEF ESPAÑOL CON ESTRELLA MICHELIN SE ENCUENTRA AL MANDO DE UN GRAN RESTAURANTE DE HABANA

Jesús del Cerro es un afamado cocinero español, natural de Aranjuez, que desde este 2 de noviembre ha comenzado a a gestionar un restaurante en la capital cubana. El Patio, ubicado en el Hotel Memories Miramar Habana de la división Blue Diamont Resorts, relanzado bajo la nueva marca NeXo's, contará con la experiencia y creatividad del reconocido chef español, quien en 1992 obtuvo una estrella Michelín por su Restaurante Casa José.

“Yo había venido de turista a Cuba hace seis años. En el camino de regreso le comenté a mi mujer: 'cuánto me gustaría tener una cocina en este país'. Nos marchamos. Y quizás por cuestiones del deseo, recibo la oferta del director de operaciones de Blue Dimond y del chef corporativo, de gestionar un restaurante aquí. Enseguida dije que sí, y habíamos rechazado ofertas en Estados Unidos. Ni tan siquiera hablamos de precio. Simplemente tenía ese deseo”, comentó al medio Caribbean News.
Como novedades de la nueva carta de El Patio, que será renovada cada mes, se encuentran algunas adaptaciones a platos típicos y recetas cubanos: “se ofertará un plato de unas manitas de cerdo rellenas de papaya y un Mojito que, en lugar de cóctel, se va a servir como postre, frío y caliente, donde la hierba buena se mezcla en un helado y el ron deberá ser absorbido en forma de espuma. Es el mismo Mojito, pero le vamos a dar otra forma”, adelantó Jesús, quien ha aclarado que trabajará con productos y materia prima locales y llevará a cabo una formación continua para el equipo que con él labore pues, aunque reconoce el talento de los profesionales cubanos, aclara de la necesidad de “un poco de técnica y aprendizaje”.
Por eso rehusó emprender su nuevo proyecto con profesionales españoles y en su lugar implantará un trabajo de formación de nuevos chefs en la Isla “Lo mejor es importar ideas para que los profesionales cubanos conviertan la gastronomía en una filosofía a partir de los nuevos conocimientos que adquieran y para que empiecen a pensar la cocina como un hecho cultural”, comentó al portal Cuba Contemporánea.
Abogando por una alta cocina, alejada de la que se cuece en los fogones y cocinas cubanos -la verdadera cocina cubana según reconoce- y alejado probablemente también de los bolsillos del cubano medio, el chef promulga una relación con la cocina sublime, que haga de cada degustación un evento placentero, una nueva manera de entender la gastronomía y el arte culinario: “Queremos darle alegría a la cocina y que la visita al restaurante sea una especie de espectáculo, igual que pago para ir a un teatro, pagar para estar dos horas y media en un restaurante. Aspiramos a que las personas lo disfruten y que cada plato sea una experiencia nueva” detalló al referido portal cubano.

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